Ley del Desarme: Cinco Años Despues.

Aquí estamos, cinco años (y unos meses) después de la super-cacareada Ley del Desarme. Las promesas de una Venezuela donde el crimen habría desaparecido simplemente no se realizaron. Mientras lo choros siguen masacrando sin piedad, la gente sigue berreando por mas control gubernamental. Yo me pregunto, si el gobierno no ha podido controlar los homicidios y crímenes violentos hasta ahora, que les hace pensar que lo van a hacer en un futuro?

La pseudo-constitución bolivariana en su capitulo tercero, articulo 43 mienta que el derecho a la vida es inviolable. Aja, muy bonito pero la susodicha no indica como es que el Venezolano promedio va a poder defender este tal derecho. Tampoco es que le interese mucho a este o a ningún otro gobierno que pueda venir en el futuro que la gente pueda garantizar este derecho. Un país bajo el terror de bien sea un elemento criminal desbocado o un estado todopoderoso es un país fácil de controlar. Un país que cree firmemente que la responsabilidad para mantenerse a salvo esta no en sus manos sino en las del gobierno, se merece el sufrimiento que tiene.

En 1987 el la Legislatura del Estado de Florida, creo la primera ley moderna para el porte de armas en los Estados Unidos. Lo diferente a otras leyes es que se denominaba como Shall Issue (Sera Otorgada) y básicamente indicaba que cualquier adulto mayor de 21 años de edad, sin antecedentes criminales y sin problemas de alcohol, drogas o violencia marital, se le debería otorgar un porte de armas en un tiempo no mayor de 90 dias y una vez cumplido los requisitos de la ley, a saber: tomar una clase que explique los deberes y derechos para portar un arma, demostrar que sabe usar un arma de una manera segura, someterse a un chequeo federal de antecedentes y tomarse las huellas digitales.

Los gritos de horror no se hicieron esperar. Los "expertos" predijeron baños de sangre en las calles por discusiones de trafico, masacres de inocentes en restaurantes, cines y bibliotecas; se auguraba que la rata de homicidios en Florida, que estaba un 20% por arriba del promedio de USA se duplicaría y que la gente no saldría de sus casa por pánico a que algún loco portando un arma con la venia del gobierno estatal los fuera a acribillar. El primer caso de uso de un arma de fuego por alguien con este tipo de porte de arma no se hizo esperar

Una noche de Marzo de 1988, Mark Yuhr un taxista de Miami le estaba haciendo una carrera a un cliente que repentinamente saco un arma de fuego y le exigió que entregara el dinero. Mark Yuhr no ofreció ningún tipo de resistencia y le entrego la caja donde llevaba lo que habia ganado en el transcurso de su turno. El criminal, un marielito (otro triunfo de la Revolución Cubana) con muchos antecedentes llamado Orlando Hernandez Barroso ordeno a Mark Yuhr a que se bajara del carro y anuncio que lo iba a matar. Mark Yuhr sin embargo decidió dejar de ser una victima y saco su respectiva arma de fuego: una Colt Combat Comander y conecto 6 balas dentro de la perversa humanidad del Señor Barroso.

Colt Combat Commander

Por motivos de fuerza mayor (dos de las balas atravesaron el diafragma, el estomago y el hígado, otra bala destrozo la vena subclavia) el Señor Barroso dejo los predios de la Tierra y muy posiblemente se encuentra en estos momentos disfrutando de un jacuzzi de lava hervida en el infierno. Mark Yuhr sobrevive el ataque. Los Chicos Buenos ganaron.

La realidad termino siendo muy distinta: La mayoría de los crimines violentos en Florida descendieron y fuertemente. Se llevaron estadísticas de todos aquellos que tenían un porte de armas del estado de Florida con la perversa intención de buscar fallas y hechos criminales realizados por estas personas y se descubrió que estos son los ciudadanos mas honestos y respetuosos de la ley de todo el estado de Florida. En resumen, todas las predicciones de fin de mundo no se cumplieron y lo peor del caso es que la ley de Florida sirvió de base para que otros estados implementaran leyes similares. El resultado final es que los homicidios y crímenes violentos descendieron en los Estados Unidos proporcionalmente a la cantidad de estados que permitían a sus ciudadanos portar armas. Al mismo tiempo en países como Inglaterra y Australia donde se impusieron prohibiciones draconianas en contra de la tenencia y porte de armas, los crímenes violentos han ido subiendo cada año.

Los profesores James D. Wright y Peter H. Rossi hicieron un estudio con criminales sirviendo condenas en distintas cárceles y al preguntarles que consecuencia o resultado temían al cometer sus crímenes, los convictos indicaron que no le tenían miedo a la policía o a ser juzgados, pero que si le tenían pánico a que la supuesta victima que iba a atacar estuviera armada porque los podía matar.

Así que la pregunta que le hago a Venezuela es esta: Hasta cuando van a ser victimas?

Que les sea leve.